Por Cecilia Della Croce y Manuel Germano.

Con dirección y adaptación del regista Willy Landin se estrenó la semana pasada en la Sala Martín Coronado del Teatro San Martín este clásico del teatro francés en cinco actos, protagonizado por un excelente Gabriel Goity, acompañado por un multitudinario elenco. La reconocida pieza de Edmond Rostand, estrenada en 1897, cuyas legendarias representaciones en escenarios de todo el mundo y transposiciones al cine fueron aclamadas por la crítica, relata la historia de Cyrano de Bergerac (Goity), un soldado y poeta bendecido por el don de la palabra y la expresividad, que está perdidamente enamorado de su prima Roxanne (María Abadi), pero que acomplejado por su gran nariz, no se atreve a declararle su devoción a su amada, quien a su vez, se encuentra atraída por Christian (Mariano Mazzei), un joven y apuesto cadete de la compañía de los gascones, comandada por el propio Cyrano, bajo las órdenes del poderoso Conde de Guiche (Mario Alarcón).

La puesta de Landin, dividida en 5 actos, respeta el texto original en su estructura narrativa. Desde la adaptación, escenografía, diseño de luces y vestuario, rubros que también forman parte de la concepción estética integral del director, se advierte una mirada muy cuidada por parte de Landin, no sólo en los detalles técnicos, sino también en las particularidades y características de cada uno de los roles, tanto los principales como los secundarios.

La primera parte de la pieza, en donde se presentan los personajes, se contextualiza al espectador en tiempo y lugar, y se recorren las líneas de la trama con una preponderancia de la comedia, es impecable. La segunda parte de la pieza, en la que las acciones toman un giro dramático, no abandona la excelencia en los rubros técnicos, pero peca de ambiciosa en algunas decisiones. Quizás el afán de fidelidad hacia el texto original de este Cyrano monumental de tres horas de duración conspira contra un mayor impacto en la resolución de los conflictos y situaciones planteadas. Dada la logística que implica la recreación de los espacios de los distintos actos, si bien este Cyrano pone en juego muchos recursos y resulta visualmente imponente, por momentos se empantana y no logra sostener la contundencia dramática y los aciertos que sí se aprecian en la primera parte, a través de un diseño escenográfico y vestuario de gran belleza y algunos guiños en los interludios musicales que invitan a los Beatles a colarse en los salones de la sociedad parisina del siglo XVII.

Desde lo actoral, Goity se adueña del escenario con un Cyrano hipnótico y avasallante. El actor ejecuta un brillante trabajo de composición de un papel consagratorio con el que soñó desde los inicios de su carrera. Mario Alarcón, Iván Moschner, Dolores Ocampo, Daniel Miglioranza, Larry de Clay y María Morteo se lucen con sólidos trabajos en sus respectivos roles, que acompañan al protagonista y jerarquizan el despliegue sobre las tablas en un espectáculo que logra cautivar a una platea que colma la sala, ya que sabe que el TSM siempre nos regala platos fuertes y de calidad, imperdibles para los amantes de los grandes clásicos como los que se programaron en esta temporada.

Elenco: Gabriel Goity, María Abadi, Mariano Mazzei, Mario Alarcón, Daniel Miglioranza, Iván Moschner, Larry de Clay, Fernando Lúpiz, Pacha Rosso, Dolores Ocampo, María Morteo, Hernán “Curly” Jiménez, Pedro Ferraro, Ricardo Cerone, Tomás Claudio, Franco D’Aspi, Pablo Palavecino, Agustín Suárez, Horacio Vay, Tito Arrieta, Lucía Raz, Jess Rolle y Paloma Zaremba.

Músicos en escena: Lautaro Asato, María del Rosario Barrios Caram, Gisela Nonaka, Gustavo Valor, Lorena Yankelevich, Keiji Yonagi

Diseño y puesta de sonido: Leo Leverone, Miguel Álvarez

Música original: Willy Landin

Diseño audiovisual: Matías Guerra, Juan Guerra, Willy Landin

Diseño de iluminación: Rubén Conde, Willy Landin 

Diseño de vestuario: Willy Landin

Diseño de escenografía: Willy Landin, Pilar Camps

Dirección general: Willy Landin

Maestro de esgrima: Fernando Lúpiz.

Asistencia de vestuario: Celeste Bulfoni

Las funciones tendrán lugar de miércoles a sábados a las 20 horas. Domingos a las 18 horas.

Valor de las localidades: platea $ 5.200 pullman $ 3.700 miércoles $ 3.000


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