Por Manuel Germano.
Dorothy es una joven directora de comedias queer. Un universo en donde ella se siente cómoda, hasta que una llamada en mitad de la noche cambia su presente de forma abrupta. La libertad de la que gozaba para su filmografía no existe más, es necesario que comience a filmar películas masivas.
En esta ficción Langlois relata a través de una mirada extravagante como la joven directora se niega rotundamente a aceptar filmar sobre cuestiones que no le interesan y que de hecho repudia.
El director recorre el camino abrumador e insoportable en el cual circula Dorothy tras recibir aquel llamado telefónico, y como el propio título del filme lo anticipa, sus propios demonios comienzan a perseguirla y atosigarla de forma constante.
“Les démons de Dorothy” puede leerse como un ejemplo, exagerado claro, de lo que siente un director sin recursos propios cuando el productor de sus filmes se interpone en su creatividad y le exige determinado tipo de películas. Dorothy siente la desesperación de no poder seguir adelante con sus producciones artísticas, por más grotescas y absurdas que sean.
El maquillaje, el vestuario y los recursos técnicos en la película acompañan el universo caótico, desordenado y desesperante por el cual la protagonista deambula. Nada se puede predecir en esta película que alterna la ciencia ficción y la comedia negra, y que cuenta con una sólida actuación de Justine Langlois.
Opinión: Buena.
Ficha técnica
Director: Alexis Langlois/ País: Francia/ Actores: Justine Langlois, Lio , Nana Benamer, Dustin Muchuvitz / Música: Olivier Pelletier/ Producción: Melodrama
OCIOPATAS. 
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