La premiada película austriaca dirigida por Severin Fiala y Veronika Franz plantea un argumento inicial sencillo y para nada pretencioso: dos hermanos gemelos reciben a su madre luego de la cirugía facial a la que tuvo que someterse, pero luego, entre ellos,se siembra la duda sobre si su madre es aquella mujer que se esconde detrás de las vendas.
Ese es el punto de partida de la película, que lejos de ser ambiciosa, se nutre de las actuaciones de 3 interpretes que logran, con muy poco guión pero con solidas actuaciones, traspasar la pantalla y lograr que el espectador se sumerja en esa desolada casa austriaca en donde, minuto a minuto, la tensión y la intriga van adquiriendo valores notables.
La información que se tiene sobre la procedencia de esa familia, y del contexto en general se devela a cuentagotas. La historia transcurre sin brindar muchos datos, con escenas enteras sin ninguna palabra. Hechos, gestos, apenas lo necesario para entender lo suficiente.
Ver como las relaciones de los personajes se van enredando, como el suspenso crece sin saber bien que es lo que se esconde, vuelve aún más tétrico el film. Como si todo el camino por el cual la película transcurre tuviera una lentitud adrede para, en los últimos veinte minutos, transformarse en una montaña rusa que alterna el horror con el terror psicológico y el suspenso.
Contar más no tiene ningún sentido, pues el condimento mas interesante de la película es el que no vale la pena develar.
Casting: Susanne Wuest as The Mother, Elias Schwarz as Elias, Lukas Schwarz as Lukas
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